Ya sea para distraernos, evadirnos o reflexionar, los pasajeros del Metro acortan sus trayectos revisando sus teléfonos, leyendo un libro o escuchando música. Para el fotógrafo y constructor civil chileno Felipe Lavín en esto hay una contradicción. «Hacer trayectos en masa es un acto muy social, pero a la vez, es muy solitario. Como dice Marc Augé, en el Metro no dejamos de rozar la historia de los demás sin encontrarla nunca», dice Lavín.

El retrato de la soledad en el Metro es uno de los grandes temas presentes en el proyecto fotográfico AUSGANG/EXIT (2018), una serie de fotografías que retratan estaciones de Metro de Berlín junto a videos grabados en el Metro de Santiago, donde el flujo de pasajeros retrata el individualismo y completo anonimato persistente en las grandes redes subterráneas.

«En las fotografías podemos ver personajes pixelados, que aluden a la falta de información que tenemos de los demás en estos medios de transporte, producto de un comportamiento autoimpuesto que nos limita a interactuar y empatizar con los demás», explica Lavín.

Con casi 10 años retratando estaciones de Metro de todo el mundo, Lavín también rescata en este trabajo las innumerables restauraciones y capas históricas que conserva el Metro de la capital alemana desde su inauguración en 1902. En sus estaciones conviven expresiones del Art Nouveau, el movimiento moderno y el postmodernismo. «El Metro sirve como un elemento de integración social y del territorio, pero da la impresión que aún no somos capaces de interactuar o acercarnos a los otros», finaliza Lavín.

Fotos y texto: Plataforma Arquitectura